Novela gráfica autobiográfica que provoca reflexión sobre los estereotipos sociales de mierda que nos gastamos y cómo estos permean las mentes parentales (aunque sea de forma inconsciente) y por ende las mentes de niñas en construcción que terminan deseando morir. Hébert comienza su calvario hacia los 11 años y termina en la edad adulta afirmando no volver a cometer el error de disculparse por ser ella misma. La historia en sí es un espejo en el que deberíamos mirarnos todas y las ilustraciones de esta artista son, sencillamente, espectaculares.
Recomendación: a gustosas de reflexión sobre cánones de belleza vigentes. A profes que quieran tratar este asunto en clase, puede dar un juego tremendo.