
Deliciosas memorias de infancia de escritora antillana que por encima de cualquier otra consideración me han transportado a un lugar exótico y desconocido para mí que probablemente jamás pisaré. Tres temas principales se trenzan a lo largo del libro, a saber: identidad, raza y clase. Condé proviene de una familia burguesa de raza negra en Guadalupe y eso otorga una perspectiva en la que una mujer europea blanca de clase media no había caído. Este es uno de esos ejemplos que justifica la necesidad de la lectura para ampliar horizontes mentales. Además se lee de tirón. No va más.
Recomendación: a gustosos de infancia antillana, racismo, construcción de identidad y padres alienados.
Foto cabecera: gatopardo.com