La contra cubierta dice que esto son «35 crónicas inteligentes», y creo que será de las pocas veces que una solapa comercial de éstas acierta. Los relatos semi-surrealistas de Keret leídos hasta la fecha acaban de quedarse eclipsados por estos 35 trozos de su vida real, literaria y familiar, presentados como si fueran cuentos suyos, con su humor cítrico, sus situaciones rocambolescas y sus finales bordados. Me quedo con todo, no sobra ni una página, no falta crítica política, relaciones familiares, hijos de Holocausto, hermanas ortodoxas y hermanos anti-sistema incluídos. Tampoco vida diaria con ataques terroristas o bombardeos. Imperdible.
Recomendación: a seguidores de Keret, a curiosos de vida de escritor israelí y a cualquiera con interés en conflicto de Oriente Medio.
NOTA DE PRÉSTAMO: Amortizado de lejos. Me ha encantado.
Hace poco leí uno suyo, «Pizzería Kamikaze y otros relatos», y me pareció un auténtico bodrio. ¿Tanto mejora la cosa?
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A mí me de entrada ya me gustan sus cuentos, el último «Y de repente, llaman a la puerta» especialmente. Este me ha encantado. Luego está la cuestión de los gustos y los colores del arco iris.
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Me gustó y de paso me enteré de alguna cosa más de la vida cotidiana de los judíos en el Israel actual : sobre el tema de judíos en los años de guerra, campos de concentración,éxodo ,etc. hay muchos libros y más o menos todos hemos leído alguno.
El relato de Mi llorada hermana,me encantó y además es aleccionador.
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He leido tanto La chica…como De repente… y sin duda me quedo con el último. Este que reseñas me queda pendiente peto intuyo que está más cerca del Keret que me gusta así que habrá que leerlo. 😉
Abrazos
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