Ah, la lluvia de noviembre. Como decía Axl, «nada dura para siempre, ni siquiera la fría lluvia de noviembre». Casi la vamos a recibir con los brazos abiertos este año. Para todo hay una primera vez. En esta librería ¿disfrutaremos? el ajuste térmico-climático al calendario con una buena lista de actividades, empezando por una colaboración que me hace especial ilusión: estaremos en el Death Café que ha organizado (entre otras cosas) la Asociación Goizargi para celebrar su XV aniversario. Para estas horas no hay plazas pero si alguien está interesado, seguid a esta gente, que repetirán. Habrá tres presentaciones este mes que comenzarán con «Yo le pinté el bigote a Stalin» (detallicos, aquí) y dos libros de la editorial local Eunate (pinchad en imagen, por Dios, que no me cabe todo en este párrafo). El sábado 18 repetiremos el «Vino negro novela tinta» de octubre porque hubo gente que se quedó con ganas, y eso sí que no. Cerraremos con el club de lectura deborahdor y el libro que está de moda y todavía servidora no ha catado, así que no sabemos todavía si ensalzaremos o destrozaremos la obra de Vivian Gornick. En todo caso, tenemos paragüero durante todo el mes, no hay excusa, deborahdores.
Foto cabecera: Jörg Dickmann