
Bueno, pues imagina que el objetivo es escribir un texto literario en el que se incluya una perfecta ambientación en la Gran Depresión estadounidense, en el que barrenes el presunto sueño americano y el capitalismo desde abajo e introduzcas TNT en cada agujerito para después dinamitarlo; que lo redactes reflejando el registro de habla coloquial de tu lengua y en el que destaquen como subtemas la soledad y la incomunicación, el racismo, la violencia y la crueldad con los más vulnerables de la sociedad. También tiene que aparecer el conflicto entre utopía y realidad y de paso, ya que estamos, que rezume machismo de la época por lo cuatro lados de la cuartilla. Además, experimenta un poco con los géneros y que sea una novela con estructura dramática, ya sabes, predominio de diálogo, espacios escénicos diferenciados… todo el lote. Por último, tiene que conmover, sacudir el alma y exponernos a todos esos ángulos muertos del ser humano que jamás queremos ver. Y que te quede bonito, claro. A ver cuántos folios necesitas. A Steinbeck le cabe todo en 100 páginas.
Recomendación: a cualquiera.


Deja un comentario