Crónica de un Sant Jordi anunciado

Había nervios porque aunque estamos en 3º de Sant Jordi (las demás libreras son catedráticas) la apuesta podía salir torcida tranquilamente, así que con pocas horas de sueño atacamos la jornada con nuestros papelitos, nuestra cata a ciegas y nuestras pedradas. Lección 1: si llevas más libros, vendes más libros; PERO, lección 2: puedes triunfar sin María Dueñas, Pérez-Reverte o Dan Brown. Lección 3 (aprendida en 2º): tacones EZ. Lección 4: Hay que llevar bocata, Katixa, bo-ca-ta. Habíamos encargado a @robocariz buen tiempo y no nos falló, conseguimos la temperatura perfecta para la práctica de nuestro deporte rey. Empezamos el día recibiendo amabilidad de la jaima vecina, café gentileza de Librería Nerea; «estamos rodeados de buena gente» fue el primer pensamiento alegre del día. Nos acompañaron dos voluntarias de la Asociación Goizargi para -en caso necesario- dar las oportunas explicaciones sobre un libro que habitualmente vendemos y que es lo más útil que os podéis echar a la estantería: «Un día todo cambió» (de Rakel Mateo e Itziar Goñi) sobre el duelo en la infancia. Sólo os diré que a Leire y María daban ganas de adoptarlas. Menudo voluntariado se gasta Goizargi. Pasaron amigos, pasaron familiares, pasaron clientes habituales, descubridores de Dovlátov, habitantes de la Baja Navarra, deborahdoras del club de lectura, personas sordas comprando libros (SÍ, también compran libros), ex-libreros y ex-libreras de Pamplona, bibliotecarias, una señora que me echó una bronca por no hacer los descuentos que a mí de diera la gana y un bellezón de husky siberiano ampliamente raptable. También escritores: Carlos Ollo se arrimó y le tocó trabajar y dedicar algún ejemplar, una Maite Mutuberría con sonrisa de oreja a oreja (qué bueno), ¡Jesús Marchamalo! como una maravillosa exhalación y Joseba Asirón, a quien tuvimos que repetir lo mismo que en años anteriores: «Sigo sin tener sus libros», cosa que se tomó -como siempre- con excelente deportividad. La Mañueta personificada en Pitxu y la mismísima Jijonenca. No faltaron editoras de ContraEscritura -mañana y tarde- dando minuto y resultado de la situación en los Sant Jordis de Irún y Donosti de nuestras Libreras Libres y ex-compañeras de ASORNA con toda la infantería. Mi hijo se pasó a saludar y todo. Mención especial del jurado para todas las que empujabais desde las redes sociales. Quizás os lo imagináis pero quiero que se sepa que servidora pudo participar en el Día del Libro gracias al curro, al tiempo y a la logística de sus padres y hermana (+consorte), ya que sin ellos sería materialmente imposible trasladar media librería a Carlos III, ida y vuelta, en doce horas. Sin ellos no hay Deborahlibros que valga.

Como dijo Espido Freire al recoger el premio Planeta, o quizás fuese Lucía Echeverría al recoger el premio Nadal:  «Gracias, sois la hostia».

Deja un comentario

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.